El fin de semana pintaba de lo más aburrido. Frío, lluvia, viento y las calles vacías. Ningún plan en el horizonte hasta que mi amigo Gabi, de los riojanos Violeta Vil, me llama diciendo que viene a San Sebastián a tocar. ¡Perfecto! Algo de luz en el oscuro inicio de febrero.
El sábado, al acercarme a Jareño, descubro que se trata de un pequeño festival que celebra su primera edición: el Lurrazpiko Festa. Nada menos que cinco grupos para una noche que a cada momento prometía nuevas sorpresas. Un cartel que cerrarían nada manos que Veronica Falls presentando su nuevo trabajo.
Nada más llegar, subían al escenario los propios Violeta Vil. No voy a extenderme en los comentarios sobre este grupo porque mi objetividad quedaría en entredicho tras las primeras líneas de este artículo. Sí diré que cada día me parecen mejores y que son capaces de crear un muro de sonido envolvente que te traslada a una mezcla de paisajes tropicales y rincones oscuros. Por algo han sido una de las mejores bandas nacionales de 2012 para Rockdeluxe.
La noche la revolucionaron Juanita y los Feos que derrocharon energía y descaro, ofreciendo argumentos más que de sobra para justificar ese gran número de seguidores que bailan durante todo el concierto y que se saben las letras de casi todos sus temas. Quizás llegaron demasiado pronto. Uno espera que las emociones vayan in crescendo, grupo tras grupo. Por eso, los correctos The Feelling of Love fueron víctimas del desgaste de la actuación anterior y se convirtieron en mera transición hacia el concierto estrella. Tendremos que volver a verlos en otra ocasión para valorar realmente sus aptitudes aunque los franceses apuntaban maneras.
Veronica Falls llegaron como uno de los grupos emergentes del lo-fi británico más prometedores. Tras su notable álbum de debut, recorren estos días la península presentando su segundo disco. En San Sebastián, demostraron ser una buena banda con un repertorio más completo que un buen par de pegadizos hits. El cuarteto tiene un sonido sólido y, aunque es verdad que tampoco son la bomba, su corta recorrido hasta la fecha hace presagiar un exitoso futuro.
Después vinieron los Dj’s que completaron una gran noche que horas antes prometía ser de lo más olvidable. Un fría noche de febrero que terminaba siendo realmente divertida. Esperemos que esta sea la primera de muchas más, con futuras ediciones del Lurrazpiko Festa.
Sin comentarios