François Ozon, ganador de la Concha de Oro en 2012 con «Dans la maison», vuelve este año al Festival con «Une nouvelle amie», que aunque podemos calificar como melodrama, la comedia está más que presente. El director ha realizado la película con la intención de llegar a la gente, tal y como ha expresado en la rueda de prensa.
El film narra la historia de dos mujeres, amigas inseparables desde la infancia. Cuando Laura fallece, Claire (Anais Demoustier) promete a su amiga que cuidará de su bebé y de su marido. Es entonces cuando comienza la verdadera trama de la película. Claire descubre que David (Romain Duris), marido de su amiga fallecida, guarda un gran secreto, y aunque en un principio ella no esté muy segura de ayudarle, finalmente se hacen inseparables.
Ozon muestra la intensa relación de amistad que une a Laura y Claire, con imágenes desde la infancia hasta el momento en que se casan, siempre llevando algo así como una vida paralela. Eso sí, Claire siempre vive a la sombra de Laura, fascinada por ella. Cuando Laura muere, tanto Claire como el marido de Laura, tienen que iniciar una nueva vida.
Es entonces cuando Ozon comienza a plantear esta transformación de David, que pasa a llamarse Virginia. De esa manera comienza a forjarse una relación especial entre Claire y David. Una historia compleja, ya que aunque existe el deseo, se encuentran con el problema de la identidad. Ahí está lo que Ozon ha querido contar; la complejidad de ser una pareja diferente. Así lo ha afirmado el director: «Quería hablar, sobre todo, de la complejidad del deseo y de la construcción de la identidad».
El director francés ha vuelto a realizar un trabajo exquisito, en el que cabe destacar las grandes interpretaciones de Anais Demoustier y Romain Duris y la maravillosa música de Philippe Rombi. Es una película con una historia complicada, pero contada de una manera dulce, que nos permite entrar en la historia y comprender a los personajes.
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